Los dolores intensos y mantenidos de los dientes o muelas son causados por la inflamación que se produce en la raíz del nervio por un diente que ha experimentado una carie, la que a su vez produjo una infección en los tejidos blandos que rodean al diente.
Otros dolores más leves o transitorios se producen por caries poco profundas y que por distintos factores como cambios de temperatura o inflamación inespecifica de la zona (gripes) producen dolor pasajero.
Las caries profundas pueden causar infecciones localizadas o abscesos en la raíz del diente los que necesitarán antibióticos y drenaje a cargo del dentista. Entretanto Ud. puede administrar analgésicos y antibióticos según instrucciones de su médico o dentista.
Las situaciones en que se sospecha infección agregada de los dientes o muelas son, además del dolor, la fiebre intensa y la hinchazón de la cara en la región del diente. En estos casos la infección merece poca duda y el niño necesitará antibióticos y analgésicos hasta que vea al dentista.
El aseo dental después de cada comida y la restricción de golosinas dulces, especialmente aquellas que se pegan a los dientes son la mejor forma de prevenir las caries y sus complicaciones posteriores. Las infecciones de los dientes pueden propagarse y hacerse generalizadas si no reciben un tratamiento adecuado y en el momento oportuno.