Sáb. Abr 20th, 2024

Es una de las enfermedades infecciosas clásicas en el niño (pestes).

Es causada por un virus de la familia herpes. Tiene un período de incubación de 15 días y se manifiesta con pequeñas ronchas rosadas que en pocas horas evolucionan a ampollitas llenas de líquido claro. La evolución posterior de 3 a 4 días las convierte en costras que con posterioridad se desprenden dejando una marca blanca superficial. Como los brotes son sucesivos durante los 3 primeros días, el período de ronchas dura una semana, durante la cual el niño puede contagiar a otros.

Una vez que todas las lesiones llegan a la etapa de costras no existe contagio. Además de las lesiones de piel pueden aparecer en la boca, conjuntiva ocular, conducto auditivo e incluso en el pulmón.

El cuidado de estos niños consiste en dar paracetamol o ibuprofeno si existe fiebre o dolor de garganta importante (¡No dé aspirina !). El niño debe continuar bañándose diariamente, ya que esto disminuye el crecimiento y reproducción de bacterias de la piel y la infección bacteriana secundaria.

El baño debiera hacerse con champú y ducha secando con técnica de empapar la toalla, sin resfregar. La dieta deberá ser con líquidos y papillas fríos, que eviten el roce y dolor de las lesiones de la boca. Igual explicación tiene la de prohibir los alimentos salados y ácidos.

En general el baño debe ser suficiente para disminuir la picazón, de no ser así, puede administrar antihistamínicos según las dosis indicadas normalmente por su médico. Si alguna de las lesiones se infecta, ( más frecuentemente las de los pliegues y de la región genito anal) en estos casos la lesión normal de la varicela se ve con una halo duro y rojo que rodea la vesícula y con una secreción amarillo turbia que forma un costra.

El halo puede crecer rápidamente apareciendo fiebre lo que se considera grave y debe ser visto de inmediato por un médico. Para evitar esto, limpie las lesiones infectadas o sospechosas de hacerlo con jabón y agua tibia y seque, luego aplique un ungüento antibiótico sobre la lesión dos o tres veces al día. Excepcionalmente otra complicación de la varicela es la encefalitis que aunque rara, puede llegar a ser grave. Si el niño presenta vómitos y cambios de conducta y conciencia llame de inmediato a su médico.

Nota: Actualmente existe una vacuna contra esta enfermedad que recomendamos después del año de edad. Si bien la varicela no es una enfermedad grave, ocasionalmente puede dar complicaciones como las señaladas que justifican la vacunación.