Los #traumatismos faciales pueden ocasionar diversas #lesiones dentales en los niños, siendo las más comunes el sangramiento de encías, las fracturas #dentales y la avulsión dentaria o arrancamiento del diente.
El sangramiento de encías suele deberse a heridas en la encía y golpes en los dientes que no llegan a producir fracturas ni arrancamiento. En estos casos, es importante tocar suavemente los dientes y, si están ligeramente movidos pero aún firmes, se recomienda proporcionar al niño una dieta blanda y papillas durante 4 a 5 días para que los dientes se afirmen. Si el desplazamiento es significativo, puede ser necesario ajustar y fijar el diente mediante la intervención de un dentista.
En caso de fracturas dentales, es fundamental acudir a un dentista para que realice el tratamiento adecuado. Si un diente permanente es arrancado por completo, es necesario actuar con rapidez. Recoja el diente cuidadosamente y colóquelo en una taza de leche o agua para conservarlo. Luego, lleve al niño y el diente arrancado de inmediato al dentista. El reimplante del diente debe realizarse dentro de los 30 minutos posteriores al accidente. Es importante destacar que los dientes de leche arrancados no pueden volver a colocarse. Sin embargo, es necesario que se revise el crecimiento de los nuevos dientes para detectar posibles lesiones.
En cuanto al manejo del dolor, se puede administrar paracetamol o ibuprofeno según las recomendaciones de dosis adecuadas para la edad del niño.
Ante cualquier traumatismo dental en su hijo, es fundamental buscar atención odontológica lo más pronto posible. Los especialistas podrán evaluar la situación, tomar las medidas necesarias y brindar el tratamiento adecuado para garantizar la salud y el bienestar dental del niño.