Vie. Abr 19th, 2024

Es cuando se tapa el conducto que transporta las lágrimas entre el ojo y la nariz. Esto ocurre con frecuencia en los niños muy pequeños dado la extrema finura de ese conducto. La mayor parte del tiempo, solamente se obstruye un lagrimal a la vez.

El síntoma de esta obstrucción es que el niño tiene un ojo siempre húmedo. Las lágrimas corren por la cara del bebé aunque no llore. Cuando llora, la ventana de la nariz por el lado osbstruído permanece seca. El problema comienza antes de que el niño tenga 1 mes de nacido.

El problema que se puede producir a continuación es la infección del ojo que se inicia con la conjuntiva (conjuntivitis ) que se manifiesta por enrojecimiento del ojo y párpado y aparición de secreción turbia o pus en vez de lágrimas claras.

¿ Qué hacer ?

Frote suavemente la esquina interior e inferior del ojo del bebé con su dedo o con un aplicador de algodón limpio. Esto ayuda a quitar las secreciones que se pueden acumular y destapar el conducto. Para hacerlo: Lávese las manos. Comience por la esquina interior del ojo.

Presione suavemente hacia arriba, con lo que debiera salir una pequeña cantidad de líquido claro. Si el párpado se pone rojo o hinchado, llame a su médico, igualmente si aparece un abultamiento rojo en la esquina inferior interior del párpado. Llame al médico de su hijo durante horas de consulta si hay mucha secreción amarilla saliendo del ojo del niño. Probablemente su hijo necesitará un antibiótico en forma de ungüento o gotas oftálmicas.